A lo largo de mi carrera profesional he desarrollado distintas actividades de naturaleza jurídica hasta que en 2007, en parte fruto de la casualidad, di mis primeros pasos en la que después se convertiría en mi profesión: preparador de oposiciones de la Administración General del Estado.

Aunque entonces no era consciente, echando la vista atrás, mi pasión por el Derecho y la Docencia, unida a mi condición de Funcionario y mi experiencia como opositor, no podrían haberme conducido por otro camino diferente.

Antes de iniciar mi actividad como preparador de oposiciones superé con éxito tres pruebas selectivas de acceso a diferentes Cuerpos de Funcionarios, dirigí cursos de formación para empleados públicos e impartí seminarios sobre Derecho Administrativo y Función Pública.

Tras 18 años de servicio activo en la Administración, simultaneados con el ejercicio de la abogacía y la docencia, decidí, definitivamente, dirigir todos mis esfuerzos a un único objetivo: ofrecer la mejor preparación a quien, como yo en su momento, desea ser funcionario de carrera.

Por este motivo, desde hace años convertí la preparación de opositores en mi única profesión, centrando todo mi trabajo en allanar el camino a quienes me eligen para que le acompañe a través de él.